El combinado albiceleste se impuso con autoridad al elenco boliviano por 3 a 0 con tantos del crack rosarino en las Eliminatorias y dio otro paso firme hacia el Mundial de Qatar 2022. Hubo 21 mil hinchas en las tribunas.

Argentina se reencontró con su gente en una noche que quedará en el recuerdo. El seleccionado nacional goleó 3 a 0 a Bolivia en el Monumental, por las Eliminatorias Sudamericanas, con 21 mil hinchas en las tribunas.

Hacía un año y medio que no había público en las canchas del fútbol local y no hubo mejor manera de retomarlo que con un partido como el de este jueves, con un Lionel Messi brillante, autor de un triplete fantástico, y una certeza: el campeón de la Copa América da pasos sólidos hacia el Mundial de Qatar 2022.

Con estos tres puntos Argentina se consolida en la segunda posición de la tabla rumbo a la próxima Copa del Mundo. Acumula, entonces, 18 puntos y se mantiene por debajo de Brasil, el único líder. En el tercer puesto se ubica Uruguay, con 15, seguido por Ecuador y Colombia, ambos con 13. Hasta ahí, los cuatro que clasificarían en forma directa y el quinto que iría al repechaje.

Messi fue el líder total de un equipo que no tuvo problemas para superar a un débil seleccionado boliviano, que se encuentra en el noveno puesto, con apenas seis unidades. El control argentina fue total y en ningún momento corrió peligro la victoria albiceleste.

Los hinchas pudieron volver a las canchas en la Argentina y disfrutaron de la victoria del conjunto nacional frente a Bolivia, por la décima fecha de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022. En el estadio Monumental hubo reconocimiento para los jugadores del campeón de América: Messi fue el más ovacionado. Pero también para el entrenador, Lionel Scaloni.

El DT ya había sido ovacionado en la previa del encuentro. Sin embargo, luego del 1-0 de Messi debe haber vivido un momento muy especial cuando los 21 mil fanáticos presentes rugieron por su proyecto: «¡La Scaloneta la p… que lo parió! ¡La Scaloneta la p… que lo parió!», bajó desde las cuatro tribunas, como un grito desaforado.

El encuentro se jugó en el estadio Monumental de River, que abrió sus puertas para 21 mil hinchas (17 mil pudieron comprar sus tickets y los otros cuatro mil fueron a través de los sponsors de la Selección) que consiguieron su entrada para alentar a Lionel Messi y a los campeones de América.

El partido estuvo a cargo del peruano Kevin Ortega, quien es asistido desde el VAR por su compatriota Víctor Carrillo y en el AVAR por el paraguayo Milcíades Saldívar.

El equipo dirigido por Lionel Scaloni se presentó ante el público argentino luego de la histórica conquista de la Copa América en Brasil que cortó una larga racha de 28 años sin títulos para el seleccionado mayor.

El partido cerró la participación del equipo en la triple fecha del camino hacia Qatar 2022, luego de la victoria en Caracas ante Venezuela y el escándalo que originó la suspensión del clásico ante Brasil, en San Pablo.

El público argentino regresó a un estadio de fútbol luego de un año y medio debido a las restricciones por la pandemia de coronavirus en una prueba piloto del Gobierno nacional que autorizó el ingreso del 30 por ciento del aforo del estadio del barrio porteño de Núñez.

Para encontrar el último partido con asistencia del público en los estadios del fútbol argentino había que remontarse al 11 de marzo de 2020. Aquella noche, mientras el coronavirus comenzaba a golpear fuerte en todo el mundo, Argentinos Juniors y Cañuelas se enfrentaban en los 32avos de final de la Copa Argentina, en la cancha de Arsenal de Sarandí. Era la despedida de los simpatizantes de las canchas locales, hasta este jueves. La noche en la que Messi lloró de alegría.

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