Murió el Loco Gatti: el arquero que desafió al fútbol y ganó
Hugo Orlando Gatti falleció a los 80 años tras complicaciones de salud. Ex arquero de Boca, River y la Selección, fue una leyenda del arco y un personaje inolvidable del fútbol argentino.
Hugo Orlando “El Loco” Gatti murió este domingo a los 80 años, dejando atrás una vida marcada por la pasión, la rebeldía y el amor eterno por el fútbol. Dueño de una personalidad tan extravagante como carismática, Gatti fue mucho más que un arquero: fue un ícono. Un showman del arco, un pionero que jugó con los pies cuando nadie lo hacía, y que patentó “la de Dios”, una atajada que todavía hoy vive en la memoria de los hinchas.
La noticia golpea fuerte al corazón futbolero. Gatti había sido operado de la cadera hace menos de un mes, pero una infección viral complicó su cuadro y derivó en un fallo respiratorio agudo. Ya había estado al borde de la muerte en 2020 por COVID-19, pero salió fortalecido con su clásico humor: “Yerba mala nunca muere”, dijo entonces. Hoy, la yerba mala se fue… pero dejó una semilla inmortal.
Una vida bajo los tres palos
“El Loco” nació en Carlos Tejedor el 19 de agosto de 1944. Debutó como profesional en Atlanta en 1962 y luego atajó en River, Gimnasia, Unión y finalmente Boca, donde se convirtió en leyenda. Con la azul y oro disputó 417 partidos y ganó todo: torneos locales, Copas Libertadores y la Intercontinental ante el Borussia Monchengladbach.
Su estilo era provocador, arriesgado y efectivo. Desafiaba las reglas del juego, se adelantaba al rol del arquero moderno. Gatti era el show y el susto, el talento y la locura. Se retiró a los 44 años con 765 partidos en Primera y 26 penales atajados, récord que comparte con Ubaldo Fillol.
Más allá de las atajadas
Fue parte de la Selección argentina, donde jugó 18 partidos y formó parte del plantel en el Mundial de Inglaterra 1966. Aunque no tuvo minutos, ya era reconocido como un arquero diferente.
En los últimos años, Gatti vivió en España, donde se desempeñó como panelista en programas deportivos, siempre fiel a su estilo frontal, polémico y sin filtro. En 2024 había sufrido la pérdida de su esposa, Nacha Nodar, otro golpe duro en su vida personal.
Una leyenda que no se va
La imagen del Loco, con su melena rubia, los brazos abiertos, el pecho inflado y esa sonrisa desafiante, queda tatuada en la historia del fútbol argentino. Amado y discutido, fue uno de los personajes más auténticos y apasionantes del deporte.
Murió Gatti. Pero el Loco, ese que se animó a ser distinto, ese no muere nunca.
¿Y vos, qué recuerdo tenés del Loco? Te leemos en los comentarios